Obedecer?

obedecerEl que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él. (Juan 14:21)

 Para que una empresa logre sus objetivos se requiere la participación de sus integrantes no solamente con su fuerza laboral y habilidades, principalmente se requiere someter su talento y su tiempo a obedecer las ordenes impartidas. Y es que la obediencia es una actitud responsable de colaboración y participación, importante para las buenas relaciones, convivencia y el trabajo productivo. La obediencia nos lleva a practicar una libertad plena. Pero porque obedecer?

Aquí hay algunos puntos que te ayudarán a cultivar mejor este valor:
La obediencia no se determina por la opinión de la multitud, concéntrate en realizar de la tarea o cumplir el encargo que se te encomienda. La opinión en nada cambia el contenido de la orden.
Ejecuta las peticiones u órdenes sin calificar si son de tu agrado o no, cuando Dios lo dice es porque tiene una fuente de bendición esperando por ti.
Toda encomienda es importante. Si es aparentemente simple, evita pensar que no corresponde “a tu categoría”. Si no cumples con las cosas pequeñas, jamás cumplirás con las cosas que consideras como “grandes”.
No te quejes por los continuos encargos que recibes. Por una parte se tiene confianza en tu capacidad; por otra, ¿no crees que estás encubriendo tu pereza?
Procura eliminar de tu persona esa visión mediocre de “sólo cumplir”. Ten iniciativa: termina las cosas al detalle dando un toque final a todo lo que hagas, es la diferencia entre obedecer y cumplir, y eso, es lo que hace un trabajo bien hecho.

 Finalmente el obedecer es una muestra de compromiso y amor al que solicita tu obediencia… Si los vientos y el mar obedecen a Jesús, estas tu dispuesto a obedecerle?