Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles (Hechos 18:9)

La visión es el más importante de los sentidos de las aves, dado que es esencial para un vuelo seguro. Un águila, puede ver una hormiga correteando por el suelo desde la azotea de un edificio de 10 pisos. Pero su visión no es suficiente para para conseguir suplir sus necesidades. Si un águila ve su presa desde las alturas pero no va por ella, pronto su misma visión va a ser afectada.

Dios tiene un propósito especial contigo. Cuando tú lo comprendes, se abre una puerta de oportunidad increíble para ser bendecido y tener una vida productiva. Pero si te quedas acariciando la visión y no haces nada al respecto, hay posibilidades que muy pronto vas a abandonar la visión y con ello te vas a perder de todas las bendiciones que esa visión tiene diseñada para tu vida.

En un momento como este es necesario actuar con el impulso y la confianza que el Espíritu de Dios ha puesto en ti para impactar la vida de aquellos que Dios ha puesto a tu lado. El Señor te dice, no temas, sino habla y no calles… Vas a hacerlo?